El proyecto ENERsip permite monitorizar los electrodomésticos para controlarlos de forma remota, o programarlos para su ejecución en horas pico de generación de energía procedente de fuentes renovables.
Los científicos y tecnólogos que participan en el proyecto, un consorcio compuesto por una decena de socios de cinco países europeos liderado por la empresa española Tecnalia, han diseñado, desarrollado y validado una plataforma TIC que permite reducir el consumo eléctrico a nivel residencial en torno a un 30%, integrando además sistemas de microgeneración basadas en energías renovables como instalaciones solares fotovoltaicas.
La clave del éxito radica en dos estrategias: reducir el consumo eléctrico en los hogares (en torno a un 15 o 20%) y ajustar el consumo y la generación eléctrica en los distritos (un 15 o 20%). Por un lado, el sistema proporciona a los usuarios información sobre sus consumos, permitiendo identificar los electrodomésticos que más gastan, y sugiere posibles soluciones, intentando modificar ciertos comportamientos y fomentando buenas prácticas que permitan reducir la factura eléctrica.
En este sentido, la plataforma ENERsip permite monitorizar los electrodomésticos mediante redes de sensores y actuadores para controlarlos de manera remota a través de aplicaciones web.
Por otro lado, el sistema que han diseñado lleva a cabo acciones automáticas que permiten ajustar en la medida de lo posible el consumo de los domicilios dentro de un distrito con la generación procedente de fuentes de energía renovable dentro del mismo, reduciendo flujos energéticos y, en consecuencia, pérdidas y costes.
Redes eléctricas inteligentes y ahorradoras
Las conclusiones de este proyecto, enmarcado en el ámbito de las llamadas Smart Grids (redes eléctricas inteligentes), evidencian que gracias a las acciones automáticas que permiten realizar las TIC se pueden alcanzar ahorros en el consumo eléctrico de hasta un 30 por ciento. Para obtener estos resultados, los investigadores han comprobado el funcionamiento del sistema en diversas simulaciones informáticas y han validado la plataforma en un proyecto piloto en tres edificios en diferentes puntos geográficos de Israel.
Estas cifras, además, encajan en la senda de otros informes, como el Smart 2020, por ejemplo, que estima que la aplicación de las TIC para la mejora de la eficiencia energética podría traducirse en un ahorro de costes a nivel global de aproximadamente 600.000 millones de euros en el año 2020.
FUENTE: Infoambiental